ME PRESENTO...

           El otro di vi una película muy inspiradora. Y digo inspiradora y no buena, porque aunque es verdad que la salvan las actuaciones de las respectivas actrices principales (un joven talento y una de esas de toda la vida que salva cualquier película por muy mediocre que sea), entiendo que para el común de los mortales sea incluso infumable. Pero yo que soy muy friki, le encontré su punto, como digo, incluso hasta inspirador, tanto, que me ha motivado a empezar a escribir este blog. Eso sí, bien es cierto que en esta etapa de “break laboral” de mi vida, las flores del campo o las nubes del cielo me resultan inspiradoras.

                                                         

Pero bueno, el tema que me ocupa hoy no es ser crítica de cine, así que paso a presentarme. Soy gestora de carteras, de esas que gestionan el dinero de los ricos, con una trayectoria laboral de casi 10 años en el arduo mundo de las finanzas, esposa, madre y viviendo actualmente en un país que no es mi querida España. Voy a omitir mi nombre porque bueno, una tiene una reputación que mantener, pero vamos, con los detalles que he dado, creo que mi alma ha quedado suficientemente desnuda.

Como mencionaba al principio, por motivos que ahora no vienen al caso, estoy en lo que podríamos llamar en un “parón profesional”, y viniendo de un sector tan estresante y absorbente como el financiero, creo que no hace falta que explique lo traumático que ha sido el cambio de 100 a 0, en un segundo.

Es cierto, que ser dueña de tu tiempo (bueno del 20% que me dejan libre mis retoños) es “priceless”, pero aun así, el día es muuuuy largo cuando no tienes un trabajo.

Así que a parte de retomar hobbies, deportes que no practicaba desde la época en que en mi cara había acné en vez de arrugas, y  dedicarme a mi cuerpo, he dedicado muchas horas a otra de mis aficiones, que antes era obligación sobre todo, pero que ahora, con tiempo, se ha convertido en un hobbie: LA COCINA.

Pero como una es de formación profesional, no me he desconectado del apasionante mundo de los mercados, las acciones, los spreads de crédito, los profit warnnings, y esas cositas que ahora que no afectan al dinero de mis clientes, y por tanto a mi bonus, las veo desde otra perspectiva.

Y pensando y pensando (recuerdo que tengo un momento zen e inspirador en mi vida), he llegado a la conclusión de que al final los mercados financieros y la cocina tienen muchas similitudes: en ambos vas al mercado a comprar los “ingredientes” (esta era fácil), el resultado depende mucho de tu olfato, en ambos hay que tener paciencia y ser minucioso, el timing cambiara radicalmente el resultado, una acción vendida a tiempo te puede cambiar la vida, (o si no que se lo pregunten a los que vendieron aerolíneas el 10 de septiembre del 2001), y un pescado un minuto de más en el horno, lo arruinara, y ambos son absolutamente desagradecidos, puedes dejarte la vida y el alma en ello, y luego tener un resultado desastroso. Tu cliente te sacara el dinero, y tus invitados te criticaran y serás de por vida la que quemo las natillas, aunque solo te haya pasado una vez.

Así que he decidido unir mis dos aficiones. Seguiré como cada mañana leyendo que pasa por los mercados financieros, y después cocinare, inventare recetas nuevas y reinventare las existentes y buscare similitudes. Una manera amena y divertida de sobrellevar estos tiempos de tanta incertidumbre en los mercados.

Y como el ser humano fue creado para estar en pareja, contare con un experto gestor, un gurú de las finanzas, que aparte de  aportar su granito a nivel culinario, nos dará pinceladas, recomendaciones y visibilidad sobre aspectos más económicos y de mercado, y me ayudará a analizarlo. Así que seremos el tándem perfecto, porque qué habría hecho Fischer Black sin Robert Litterman? O sin Myron Scholes? O Ferrán Adriá sin Sergi Arola? O Bonnie sin Clyde? Epi sin Blas?

Me referiré a mi asesor financiero, cuya identidad quiere mantener en el anonimato, como PGF, siglas de “Pinche Guru de las Finanzas”, entendiendo “Pinche” en su connotación de ayudante de  cocina y no como expresión, a veces peyorativa, coloquial mejicana.

Asi que la idea es analizar el mercado, estudiarlo y tras un pequeño comentario, terminaremos con una receta, de esas de toda la vida que te hacia tu madre, o mas sofisticada para agasajar al mas exigente de tus invitados, todo dependerá del mi humor, y del de los mercados!

En fin, amantes de la comida y devotos de las acciones y los bonos, unamos nuestras mentes y busquemos una forma divertida de mejorar nuestro performance, eso sí, con el estomago lleno de ricas viandas.

Buena suerte a todos!!

ERS